Hagamos en diario a quien a diario pensamos. . .

En la semana la profesora había mandado un mail para dividirnos en 3 grupos. Gracias al querido FACEBOOK designamos los grupos rápidamente, como siempre por orden de lista! Mismo grupo de seminario de biología, química y clases de matemáticas, es como mi “sub-curso”… ORGINAL FORMA DE COMPARTIR CON TODOS NO? Pero bueno es lo más práctico en verdad.

Drama I ese fue el nombre que se le dio a esta nueva clase de estrategias. Cuando la escuche dije -OHH! Haremos una obra! -O dije tal vez nos harán ejercicios de actuación-  Pero no, la clase fue bastante distinta a lo que me la imaginé. Primero la profesora Erna esta vez no sería la encargada si no que el Profe Félix. Segundo claramente no tuvimos que actuar, al contrario los que se dio fue  lo menos actuado que hubo jejejeje.

Entramos a la sala, la que tenía los bancos alrededor, dejando un gran rectángulo en el medio vacío. Allí, en el medio estaba lleno de hojas diarios que habían traído los compañeros del primer grupo y el profesor pidió a todos ellos que se sentaran alrededor de ellas. YO estaba en ese grupo, con diario en mano para empezar a trabajar, pero cuando el profesor dio las instrucciones ¡NO PUDE HACERLO!, de hecho acabó el tiempo dado para hacerlo y YO NO TENIA NADA, a si que frustrada me acerqué a él y le dije que no había hecho nada y para mi buena suerte el profe no me reto ni nada y me dijo-Bueno, no te preocupes la próxima sección trae un objeto. Ufffff que bien, creo que ese no era mi día!
A sí que me fui con los demás, dejando a mi sub-curso. Nos dispusimos atrás de ellos y nosotros solo teníamos que observar y escuchar.
La dinámica  desde que empezó la clase fue la siguiente: Con los diarios y cinta adhesiva mis compañeros debían hacer algo que representara y recordara a la persona MÁS IMPORTANTE PARA ELLOS, sin tijeras ni pegamento. Luego de ser terminados el profe dijo que les tomáramos fotos, fue muy entretenido ver como les tomábamos fotos, eran así como artistas que pasaban de cámara en cámara. El momento que siguió fue bastante especial y el más importante. Cada un contó el por qué de su objeto y a quién le recordaba. Para nuestra impresión a muchos compañeros trajo recuerdos y con ellos lágrimas que muchas veces eran de emoción pero también de dolor. Y fue AHÍ cuando supimos que PODÍAMOS CONFIAR UNOS CON OTROS, que éramos una carreta distinta, gente más sensible quizás, pero no menos fuerte, gente con grandes problemas y recuerdos pesados que lograron mucho y que por ellos recibieron el amor de esa personita especial, gente que puede entenderte y lo más lindo es que como casi nunca y a diferencia de otras carreras, seríamos un curso unido, como los mismos cursos de compañeros más grandes que a comparten algo más que solo el entusiasmo de ser  T.O!